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Si a la vida, no al Suicidio...

Desde hace un tiempo, cada vez se escuchan más noticias de suicidios y aunque este fenómeno afecta a personas de todas las edades, últimamente, en la mayoría de los casos se refieren a niños y adolescentes. Según la OMS, cada año alrededor del mundo se suicidan 800.000 personas de diferentes edades, en su mayoría jóvenes.

Son varios los motivos que, tanto a mujeres como a hombres los lleva a tomar esta tremenda decisión: la apatía, la falta de estima, un futuro incierto… ante tanta incertidumbre sienten que la vida no tiene sentido.

El bullying también está destrozando y amargando la infancia de muchos niños de corta edad, y muchos intentando dejar de sufrir, deciden quitarse la vida.

Los especialistas en el tema se preguntan por qué una persona toma una decisión tan drástica. ¿Qué los impulsa a quitarse la vida? Nadie tiene una respuesta convincente. Todo son suposiciones, teorías, pero ninguno encuentra la clave, y poco a poco el suicidio se ha convertido en una pandemia muy difícil de controlar.

Un estudio realizado, por científicos, por nuestra mente pasan 60.000 pensamientos diarios, conscientes e inconscientes de los cuales el 80% son negativos. Quiero que no te sientas culpable ya que todos, en este mundo hemos tenido o tenemos estos síntomas.

Es una lucha muy desigual, ya que solo tenemos un 20%, para tratar de vencer, esos pensamientos, ideas o tal vez voces, que nos quieren destrozar la vida, con tristezas, amarguras, depresión y hacernos creer que no valemos ni servimos para nada, todo este combo nos afecta nuestra calidad de vida.

De acuerdo a este estudio, nos gustaría ir más allá de la apreciación psicológica, y teniendo en cuenta que cada uno de nosotros además de un cuerpo físico, somos alma (mente, voluntad y emociones) y espíritu, debemos entender que es aquí, en nuestra mente, donde se libra una tremenda y cruel batalla entre el bien y el mal, tema que hemos desarrollado en la reflexión: Tom & Jerry. Cuando nos enfocamos a escuchar solo la voz del mal, este se apoderará de nuestra mente, nos manejará como marionetas y nos inducirá hacer todo el mal posible, llegando incluso a empujarnos a que nos quitemos la vida. De pronto y muchas veces sin un verdadero motivo, vendrán a nuestra mente pensamientos negativos, como que no servimos para nada, que somos inútiles, que jamás lograremos cumplir nuestros sueños, que mejor estar muertos que vivos en este mundo tan complicado y que morir es la única forma de terminar con nuestro sufrimiento. El objetivo de estos pensamientos es confundirte, deprimirte, y que sientas desprecio por la vida. Te bloquearán la mente a tal punto que no pensaras en el dolor irreparable que le harás sentir a tus seres queridos, te humillará de tal forma que en un momento te sentirás sin esperanza, sin fuerzas, y es ahí donde empezarás a pensar que lo mejor es quitarte la vida. Cuando te crees la mentira que por fin dejarás de sufrir toda la crueldad y dolor de este mundo que te atormenta día y noche, estás perdido.

Aunque también hay muchas personas que sin intención especifica de hacerlo, desprecian la vida, y terminan muriendo. Me refiero a todos aquellos que totalmente alcoholizados, o bajo los efectos de las drogas, se suben a un auto y viajan a toda velocidad. En muchos casos terminan estrellándose contra un árbol, un muro o contra otros vehículos, causando su propia muerte y muchas veces la de otras personas.

Eso sin contar con los desafíos y juegos mortales que aparecen en las redes sociales, con la intención de captar la atención de niños y adolescentes, que inocentemente caen en la trampa. Juegos donde el premio no es dinero, ni un auto cero km., ni un viaje a Disney, sino la muerte. Si les preguntáramos a esos jóvenes qué es lo que los impulsa a arriesgar su vida de esa forma, lo más probable es que las respuestas más generalizadas sean: Lo hacemos porque es divertido… no pasa nada… está todo bien… todos lo hacen… qué tiene de malo… Expresiones que sólo representan una total y absoluta irresponsabilidad y un desprecio imposible de comprender por la vida.

Debemos tener en cuenta que Jesús dijo, algo sumamente importante, refiriéndose a nuestro enemigo Satanás: "El propósito del ladrón es robar, matar y destruir; pero Mi propósito es darles una vida plena y abundante". Juan 10:10-12

Con estas sencillas palabras, puedes identificar fácilmente quien está detrás de la muerte y del suicidio.

¿No te parece, que a veces le damos mucha importancia a este ladrón invisible, cuyo único propósito es estimularte con ideas y pensamientos nefastos y autodestructivos? Dios te regalo la vida, el día que te trajo a este mundo, Él te ama profundamente, y quiere que seas feliz, que puedas amar, disfrutar día a día de tu familia, del amor de tu vida y de toda la creación.

Nuestra sugerencia es que rechaces todo pensamiento de muerte que venga a tu mente, no puedes pensar ni por un instante en regalar lo más preciado que tienes, "la vida"

Desde hace varios años damos conferencias en colegios y en otros ámbitos. Para mi sorpresa en el nivel secundario, me encontré que la mayor parte de los jóvenes y adolescentes, sufren de una profunda baja autoestima, por causa del rechazo, humillaciones y burlas que acaban en depresión. Todo este sufrimiento en la mente frágil de niños y jóvenes, que en la mayoría de los casos no está preparada para diferenciar y enfrentar de dónde vienen esas ideas, pensamientos, ideas y voces que le hacen sentir que la vida no tiene ningún sentido y valor, es lo que en muchos casos puede terminar en suicidio.

Ya sea premeditado o improvisado puedo decirte con absoluta autoridad y certeza, que el problema es netamente espiritual.

Todos tenemos problemas y durante el resto de nuestra vida seguiremos teniéndolos: conflictos, tristezas, desánimo, desilusiones… Lo terrible es cuando influencias de orden espiritual, que no tienen nada que ver con Dios, más bien todo lo contrario, se aprovechan de nuestras emociones más negativas y nos llevan a una situación de desazón y desesperanza tan profunda, que les es muy fácil poner en nuestra mente pensamientos de suicidio.

Pero hay otra opción, Dios te ofrece una clase de vida auténtica, plena y con propósito.

Si al leer esta reflexión te sientes identificado, con lo que estamos compartiendo, es necesario que dejes de escuchar a ese enemigo que solo quiere destruirte.

Pero para contrarrestar esta influencia destructiva, necesitas acercarte a Dios. Solo Él te ofrece vida y en abundancia. Reconoce tus pecados, y que has vivido de espaldas a Él, y dale las gracias por perdonarte, mientras abres la puerta de tu corazón, para que reine en tu vida, y así darle el verdadero sentido a tu existencia.

“Es nuestro mayor deseo, que estas palabras, lleguen a lo más profundo de tu ser, ya que hoy tú tienes la oportunidad de elegir la VIDA”

Dios te bendiga.