
Que tengas de todo un poco…
Un poco de sensibilidad…
Para poder apreciar las bellezas de la vida.
Un poco de coraje…
Para dejar la timidez a un lado y poder realizar aquello que deseas.
Un poco de solidaridad…
Para no quedarte indiferente ante el sufrimiento de la humanidad.
Un poco de bondad…
Para no desviar la mirada de quien te pide ayuda.
Un poco de tranquilidad…
Para poder dormir como los ángeles al final de cada día.
Un poco de alegría…
Para pintar una sonrisa en el rostro de los demás.
Un poco de humildad…
Para reconocer aquello que no eres, aquello que te falta.
Un poco de amor propio…
Para que puedas reconocer tus cualidades y lo que te gusta de ti mismo.
Un poco de fe…
Para guiarte, sostenerte y mantenerte en pie.
Un poco de sinceridad…
Para ser auténtico, ser tú mismo y vivir mejor.
Un poco de felicidad
Para disfrutar de la vida y brindarla a quien la necesita.
Un poco de amistad…
Para que descubras que… quien tiene un amigo, tiene un tesoro.
Un poco de esperanza…
Para que creas en la vida y siempre tengas alma de niño.
Un poco de sabiduría…
Para aprender a vivir de la manera más inteligente, de acuerdo a la voluntad de Dios.
Un poco de los deseos de tu corazón…
Para alimentar el cuerpo y activar el espíritu.
Un poco de tus sueños…
Para que cada día alimenten tu alma.
Y amor, bastante amor, mucho amor
Para que puedas amar y sentirte amado.
Para que desees tocar una estrella y sonreírle a la luna.
Para sentir que la vida es bella.
Para que descubras que hay otro sol dentro de ti.
Para que te sientas feliz en cada amanecer y sepas que el amor es la mayor razón para vivir.
Y si no tienes amor, nunca permitas que se marchiten las ganas y el deseo de encontrarlo.